Propiedades del DMSO
Los estudios realizados en 1963 revelaron que podía aliviar el dolor, reducir la inflamación, impedir el crecimiento bacteriano, suavizar el tejido cicatrizado, mejorar el suministro sanguíneo. Es un excelente calmante y relajante muscular y actúa como freno contra la inflamación en el cuerpo, también como diurético. Como medicamento está autorizado para cistitis intersticial (EE.UU.)
Adicionalmente, se descubrieron mejorías en los siguientes síntomas: dolor de esguinces, torceduras, quemaduras, artritis, fracturas, posee un importante factor en la regulación del sistema inmune.
Se ha demostrado que el DMSO elimina virus y hongos, y puede ser eficaz en lesiones deportivas, esclerodermia, miastenia grave, y otras enfermedades.
También se utiliza para preservar embriones humanos o como conservante de células madre, células de la médula espinal y órganos para trasplantes.
En lo que se refiere al dolor, es capaz de reducirlo, debido a su efecto de transportar agua u otras sustancias a zonas deshidratadas, y por ser un vasodilatador que estimula la circulación, mejorando el suministro de sangre. Calma y reduce varices, trombos, calambres, queloides, cicatrices. Lo podemos utilizar muy bien para aliviar hematomas o eliminar el dolor de cabeza.